Hace unos días, en una reunión de amigos y en plena conversación sobre no me acuerdo qué, Juan exclamó:

– ¡Yo sé en que piensan las mujeres!, en serio, ¡es un don!

Yo creo que Juan, no tiene ni idea de qué piensan las mujeres. Y no me mola entrar en ese juego de los hombres son así y las mujeres “asá”.

¿Recuerdas que hace poco te conté que había leído un post sobre 35 opiniones de mujeres que pensaban que le hacía más viril a un hombre? Yo quise ser la 36 e invitar a mis amigas a opinar. Prepárate …

Ana, 40 años.

“A mi lo que más me gusta en un hombre son sus orgasmos y creo que define perfectamente el carácter del tipo de tio con el que te acuestas. Me gusta el hombre que grita y pone cara de asesino mientras llega al climax. Aquel que se queda temblando y agonizando porque ha derrochado hasta la última gota de placer como si se le hubiera ido la vida en ese mismo instante. Que poco a poco resurge y te dice: – ¡Ha sido la hostia!.”

Pienso exactamente igual que Ana. ¡Los orgasmos hay que celebrarlos por todo lo alto! A mi me hacía gracia un noviete (rollete, amiguete o como lo quieras llamar) que tuve, que finalizaba siempre con la siguiente frase: -¡Éste ha sido el mejor de mi vida!. ¿No tendría memoria orgásmica? Ana me ha hecho recordar algunos orgasmos viriles. Porque estoy de acuerdo con Ana que define un poco el carácter del mismo. Hay de todo. Están aquellos que les da por insultar. Que te pillan en seco y contestas: – ¡puta, será tu madre!. Pero no lo haces y continuas el juego poniendo cara de fulana. También están los que se inventan historias y te hacen meterte en un personaje. Cuando de repente y sin darte cuenta eres caperucita que paseas por el campo y él un secuestrador que te pregunta: -¿Dónde vas caperucita? – A lavarme el “pepe” al río, respondes. ¡Es de un chiste! ¡Estaba a huevo! Y el juego finaliza porque le jodiste el plan. También están los guerreros. Esos que lo celebran a lo King Kong y se dan unos golpecitos en el pecho. ¿Y los modositos sensibleros que apenas te enteras de nada porque deciden no hacer ni un solo ruidito? ¡Así no hay dios que se entere! ¡Avisa!¡Joder! ¡Avisa!

¿Y el religioso? El que nombra a Dios siete mil cuatrocientas tres veces. ¿Irá a misa los Domingos? Hay que ver como enrollo con estas cosas…

Vanesa, 36.

“A mi me encantan los hombres con manos grandes, es en lo primero que me fijo. No sé por qué siempre pienso que las manos tienen relación con su miembro. Y sinceramente, a mi me gustan grandes. ¡Hasta ahora no he fallado!”.

Joder “La Vane”, no sabía yo ese truco. Siempre pensé que era la nariz lo que tenía relación con el tamaño.

Natalia, 35.

“Me gustan los hombres musculosos con pinta de empotradores. Con pinta de cogerte de la melena y no precisamente para hacerte un recogido.”

jajaja ¡Nataliaaaa! En serio, no te imaginas como es ella, tan modosita … Me ha dejado perpleja. -Recuerdo un pavo que intentó hacer lo mismo conmigo, respondí a Natalia. – Lo intentó porque me cogió de las extensiones y se quedó con ellas en la mano. Imagina la cara del tío. Y la mía que pensé en dejarlo ahí o continuar. Son cosas que pasan… Aunque sabes que acabas continuando y pasando de las extensiones y de tus cuatro pelos distraídos que se te han quedado. Un saludo, que sé que me lees …😉

Desirée 23

“¿Viril? MMM. Pues no sé, ¿no entiendo a qué te refieres?.”

Supongo que con 23 aún es pronto para virilidades … Yo con esa edad no diferenciaba mucho.

Marta 39

“Pues tía, a mi me encanta el olor a sobaco. No se por qué me vuelve loca.”

Como decía un torero, “hay gente pa tó”.

Andrea 25

“A mi me parece muy viril un hombre inteligente. Culto y extremadamente sensible. Que llore viendo pelis. Tierno muy tierno.”

Me da a mi que los que le molan a Andrea son los que no celebran su orgasmo por pudor.”

Cristina 37

“A mi me parece muy muy viril un tío que haga pasta, mucha pasta…”

¿A Cristina le pone la cocina italiana? ¿A Cristina le ponen los tíos con dinero? Tengo una duda, a ver … Y no me estoy haciendo la tonta, o si, un poco. Vale si me hago la tonta. ¿Por qué es tan cachondo que un tío tenga dinero? ¿Funcionan mejor en la cama que uno que no tenga ni un pavo?¿Nos pone cachondas el hecho de pensar que quizás no tengamos que trabajar nunca “MÁIS”? Porque eso suena realmente muy, pero que muy cachondo.

A mi personalmente me parece realmente viril en un hombre los pelos en el pecho. Muy entrañables aquellos pelitos que parece que saludan por arriba de una camiseta o camisa entre abierta, que dan ganas de acercarse a ellos y hablarles. ¡Cómo me encantan! Soy una antigua, lo sé. Para lo que quiero como diría mamá … Y a esto tengo que añadir que me encantan los hombres cultos con apariencia de hombre duro que te hacen sentir deseada todos los días. Que te regalan un viaje a Venecia y que se emocionan escuchando La Vie en Rose de Louis Armstrong. Y por supuesto los que saben celebrar su orgasmo y el tuyo.

¡Me dan ganas de brindar! ¡CHIN CHIN por la virilidad!