Hoy me he levantado de la cama y mientras lo hacía con música de fondo he hecho una coreografía. Primero una voltereta. Luego estiré un brazo apuntando hacia arriba como John Travolta en Fiebre del Sábado Noche. Caminé con el paso «moonwalk» de Michael Jackson hacía mi cocina. Enchufé la tostadora y entonces un giro musical me hizo cambiar el rumbo y el estilo de mi baile, sonaba Elvis. Me quité el pijama y me metí en la ducha. ¡Y ahí estaban mis pajaritos mañaneros que se cuelan cada mes por la ventana de mi habitación para homenajear este maravilloso momento de ser mujer!.

Y es que en realidad esto no es así. Los anuncios distorsionan siempre la realidad  de las cosas. ¡Malditos publicistas mentirosos!. Cuando estoy con la regla no puedo mover ni un dedo. Ni levantarme de la cama. Parece que me han pegado una paliza por la calle para robarme el bolso. Y a todo esto se suma que a parte de tu mala cara, tienes mal humor por todo. Tus hormonas se vuelven locas y tienes cambios de humor cada diez minutos más o menos. Yo lo describo como un momento de locura transitoria. Tan pronto estas bien como estas mal. Tan pronto te ríes como lloras. Aunque hay personas que parecen estar con ella permanentemente. Como cuando voy al ayuntamiento a pedir algún papel y me atiende una pava con muy mala cara. O las que te atienden en el Inem con cara de antipáticas antiguas. ¿Hay mujeres que tienen la regla siempre?. ¿Es un requisito que hay que tener para ser funcionaria?. Espero que esto no llegue a una de ellas porque me matan y si no, pues ¡oye! un saludo desde aquí como hacíamos en los noventa a través de la radio o la tele. Quiero mandar un saludo a las reglosas funcionarias.

Creo que el publicista debería acercarse aún más a las mujeres, y no montando el circo que montan siempre. Que una no se levanta con la regla y se pone a cantar ni a bailar. Ni le da por pensar a que huelen las nubes. ¿Es que somos tontas en este periodo?. A nadie en su sano juicio le da por pensar a que huelen las cosas que no huelen. Siempre tuve una duda con los de Evax, porque “fina” lo entiendo, pero ¿segura?. ¿Es que dan seguridad a una misma? o ¿se refieren a que si usas Evax no podrá pasarte nunca nada malo en la vida? ¿se trata de eso? Porque si es así entonces me quedo con Evax.

No hay cosa más bonita que presentar las cosas como son, «con la verdad por delante» como me ha dicho mi padre siempre. He mandado un guión de publicidad para una marca muy conocida de tampones. Juro contar la verdad, solo la verdad y nada más que la verdad. 😉

Un saludo a todas las mujeres de este mundo y a los de recursos humanos que seguro que entienden perfectamente que faltemos un día mensual al puesto de trabajo. ¡Pero que majos coño!